El otoño está a la vuelta de la esquina, y aunque esta temporada nos trae temperaturas más frescas y cambios en la naturaleza, también implica ajustar el mantenimiento de tu alberca. Si bien en algunas regiones aún se pueden disfrutar los días cálidos, es importante comenzar a preparar tu alberca para esta nueva estación. Aquí te damos algunos consejos esenciales para que tu alberca se mantenga en óptimas condiciones durante el otoño y esté lista para la próxima temporada.
1. Limpieza a Fondo
Con la llegada del otoño, las hojas, ramas y otros desechos pueden caer en tu alberca, afectando la calidad del agua y obstruyendo los sistemas de filtrado. Comienza con una limpieza profunda:
- Usa una red para retirar hojas, insectos y otros residuos de la superficie del agua.
- Aspira el fondo de la alberca para eliminar cualquier acumulación de suciedad o sedimentos.
- No olvides limpiar las paredes y escaleras con un cepillo para evitar la formación de algas.
2. Ajuste de los Niveles Químicos
Mantener el equilibrio químico de tu alberca es clave para evitar problemas como el crecimiento de algas o la corrosión de los materiales. A medida que las temperaturas bajan, el agua de la alberca necesita menos mantenimiento, pero es crucial asegurarse de que los niveles de pH, alcalinidad y cloro estén adecuados antes de cubrirla o reducir su uso.
- pH: Mantén el pH entre 7.2 y 7.6.
- Alcalinidad: Asegúrate de que la alcalinidad esté entre 80 y 120 ppm.
- Cloro: Niveles entre 1 y 3 ppm son adecuados para mantener el agua limpia.
Es posible que necesites hacer ajustes dependiendo del clima de tu región y la cantidad de uso que le des a la alberca durante el otoño.
3. Limpia o Reemplaza los Filtros
Los filtros juegan un papel crucial en mantener el agua limpia y libre de impurezas. Durante el otoño, es probable que se acumulen más residuos debido a las hojas que caen, así que asegúrate de limpiar o reemplazar los filtros regularmente.
- Si usas un filtro de cartucho, enjuágalo a fondo con una manguera.
- Para filtros de arena, realiza un retrolavado para eliminar los residuos acumulados.
- Si tu filtro está dañado o en mal estado, considera reemplazarlo antes de que llegue el invierno.
4. Reduce el Tiempo de Filtración
Con el cambio de temperatura, es probable que uses menos la alberca, por lo que puedes reducir el tiempo de funcionamiento de la bomba y el sistema de filtrado. Esto no solo te ayudará a ahorrar energía, sino también a prolongar la vida útil del equipo.
- Durante el otoño, reduce el tiempo de filtración a unas 4-6 horas diarias, en lugar de las 8-12 horas recomendadas en verano.
5. Considera un Cobertor para la Alberca
Si no planeas usar la alberca durante el otoño o invierno, es una buena idea invertir en un cobertor. Un cobertor protegerá tu alberca de la acumulación de hojas y desechos, reducirá la evaporación del agua, y ayudará a mantener la química estable por más tiempo. Además, te ahorrará tiempo en mantenimiento.
- Existen diferentes tipos de cobertores: desde los más simples para proteger del polvo y hojas, hasta los cobertores térmicos que ayudan a mantener el calor del agua.
6. Baja el Nivel de Agua
Si vives en una región donde las lluvias son frecuentes durante el otoño, es recomendable bajar ligeramente el nivel del agua en tu alberca. Esto evitará que la alberca se desborde en caso de tormentas intensas.
- No bajes demasiado el nivel de agua, solo lo suficiente para evitar desbordamientos. Normalmente, con dejar el nivel unos 5 cm por debajo del borde es suficiente.
7. Mantén los Equipos en Buen Estado
Antes de que llegue el frío, es importante revisar que todos los equipos de tu alberca funcionen correctamente. Esto incluye la bomba, los calefactores, las luces y el sistema de filtrado. Haz un mantenimiento preventivo para evitar sorpresas desagradables en la próxima temporada.
- Considera realizar una revisión profesional si no has dado mantenimiento a fondo a tus equipos en los últimos meses.
8. Planea un Tratamiento de Choque (Shock)
Si el uso de la alberca ha sido intenso durante el verano, es posible que haya acumulado bacterias o contaminantes en el agua. Antes de reducir el mantenimiento o cubrir la alberca, aplica un tratamiento de choque para eliminar cualquier residuo indeseado.
- El cloro de choque es una excelente opción para desinfectar a fondo la alberca antes de reducir su uso en el otoño.